2.19.2013

Problemas, errores y todo lo que sigue.

Hay veces que las cosas salen mal por las circunstancias del momento y no es culpa de nadie, pero siempre tengo la manía de querer martirizarme a mi misma de ser la única culpable. 
Como si tuviera que encerrarlo en una cajita y ponerle un lacito para poder decir: "venga, ha sido todo culpa tuya, ya puedes deprimirte tranquilamente" y entonces es cuando entierro el terrible sentimiento que me apesadumbra.
Y una persona en su sano juicio diría, bueno no pasa nada, sólo has cometido un error, tranquila.
Pues yo, no. No soy feliz no poniendo la música más triste que tengo en el iPod y pensando una y otra vez la desdicha que llevo puesta como mejor vestido ese día.

Además no sólo me deprimiré por el problema en cuestión, sino que mi querido cerebro intentará demostrarme que soy mucho peor de lo que me imaginaba y conseguirá que acabe regodeándome en mi tristeza -cada vez más en aumento-, recordándome errores pasados, presentes e incluso futuros, porque total, ¡seguro que llegarán!.

Ahora bien, como el error haya sido realmente mío... ¡Cuidado si os encontráis conmigo en el camino! 
Puede que vaya arrastrándome por el suelo, con el iPod a cuestas y las canciones más depresivas que podréis oír jamás en la lista de reproducción.
Pero es que no puedo evitarlo, los problemas me hacen sentir mal, muy mal, al igual que las alegrías me hacen estar en el momento más álgido de mi felicidad. Ser una montaña rusa emocional es realmente complicado, aunque supongo que lo difícil es que alguien pueda lidiar conmigo... pero bueno, aquí ando repitiendo una y otra vez lo terrible que es cometer errores y escuchando música terroríficamente deprimiente para intentar sentirme mucho mejor -aunque sea totalmente contradictorio-.

Y lo consigo.

I.

2.17.2013

Conversaciones que llevan a reflexionar.

¿No os pasa a veces que no te apetece contestar, justo lo primero que te preguntan en cuanto te ven?
Parece que saben que no quieres hablar de ello y quieren meterte el dedo en la llaga... Y en cuánto te ven.
Pum. 
A traición, donde más te duele.

Quizás pasar la vida con gente que forma parte de tu pasado o de lo que te gustaría que fuera tu presente, hablando todo el tiempo de donde están - que es justo donde te gustaría estar a tí- que hacen y porque lo hacen solo hace sentirte mal.
Puedo llegar a pensar, "oye, no seas envidiosa, sólo te hacen partícipes de su felicidad", pero pensándolo mucho, llego a la conclusión de que no es eso. Lo único que siento es tristeza y unas ganas de huir tremendas por no poder estar donde me gustaría, haciéndote eco de sus vivencias -donde hace apenas unos meses te encontrabas tú-.

Es duro ver como las cosas cambian - o más bien cambian para ti- ya que los demás siguen con la misma vida, los mismos proyectos... Y tú sigues ahí,en el mismo punto, pero en uno distinto, intentando evolucionar aunque te sientes más perdida que nunca, con ganas de empezar de nuevo, intentando ser positiva, ver lo bueno de las cosas - aunque se hace muy difícil- porque sino sabes que te hundes.
Y ni siquiera puedes permitirte eso.
I.

2.14.2013

Happy Valentine's Day

Mi pequeña aportación al día del amor.



PD. El vídeo tiene una errata, pero me costó mucho grabarlo y me dí cuenta tarde... :(

I.

2.05.2013

Amor

Ella estaba enamorada de él, no podía quitarle los ojos de encima. Allá dónde iba ella, allí estaba.
Pero él siempre vivía ajeno y a paso rápido, sin fijarse.
Todos los sabían, menos él.
Un día se paró y miró alrededor... Lo demás es historia.






I.