Ideas Grises.

Sé que no soy perfecta. Tengo defectos, y muchos. Cometo errores y quejarme es mi afición favorita. Me duele demasiado equivocarme. Siento que me muero cuando me enfado contigo, pero es que tampoco puedo estar sin ti.
Yo quiero estar contigo porque me haces feliz y me cuidas, a pesar de que soy un desastre, un caos estás ahí diciéndome que todo va a ir bien y me haces sentirme más genial de lo que nunca fuí.
Pero si me recuerdas a cada momento todos los defectos que tengo, retorciendo cada frase que digo... al final me acabará sentando mal. 
Y no quiero. 
No quería esto.
Y al final siempre llego a la conclusión de que soy yo la que lo estropea todo, que un día de estos este caos va a pasarme factura, pero de verdad. Y me gustaría que no llegara ese momento y mucho menos contigo, porque eres el único que le da sentido a todo el desorden.

I.

Nadie hace nada por nadie. 
Que triste.

El "tengo ganas de ti", ha empezado a quedarse corto.

Yo no sólo tengo ganas de eso...

Me apeteces todo el tiempo.

Dejaría de subirme por las paredes.

Te comería.

Me reiría de tu sonrisa.

Haríamos turismo en nuestra Sevilla.

Te tocaría entre las sábanas.

Por sorpresa, así es más divertido.

Y me quitaría la ropa cuando no miraras.

Me quedaría en el marrón de tus ojos a vivir.

Me ducharía contigo hasta gastarme.

Leería tus poemas y miedos, los que anotas en esa libreta.

Te contaría chistes malos, por verte reír.

Y escucharía tu música.

Me sentaría a ver como cocinas.

Te tocaría el pelo para que un escalofrío te invadiese.

Haría 100 horas en un día de Skype contigo.

Iría a buscarte.

10.000 kilómetros pueden llegar a ser tan poco.

Cuando estarías 10.000 años con alguien.

I.

Nostalgia.

Amanece.

Todo sigue su curso.

Las hojas de los árboles permanecen impasibles ante la brisa.

El sol hace reflejo en el agua de las fuentes.

Todos van a coger el autobús, a trabajar.

Fluye.

Me encuentro quieta.

Indiferente.

Aletargada.

Veo como todo fluye a mi alrededor.

Como todo sigue su curso.

Pero no soy capaz de moverme.

No me apetece moverme.

Ni despertar.

Sólo noto vacío.

Una burbuja temporal y espacial.

Andas por mi cabeza.

Me dices que todo irá bien.

Una y otra vez.

Pero sigo sin creerte.

Sólo veo oscuridad.

Y un nudo que me ata la garganta.

Quiero volver a los tiempos de luz.

Aunque cada día los veo más pequeños y lejanos.

Mejor, me abrazas hasta que lleguen.

Al menos así, se hará más corta la espera.

I.

♥

Creo que os habéis quedado sin balas... Están todas en mi corazón.

Es lo que pasa cuando das más oportunidades de las que merecen.

Aunque ya no necesito que me salvéis, ahora me salvo yo misma.

I.

Foto de MattCunningham

Cruce de palabras.

Tú.

Tu café hirviendo.

Como cuando me hierven las mejillas al verte.

Mejillas que son besadas por ti.

Besos de tus labios.

Tus labios con sabor a miel.

Miel que no se desgasta.

Como no se desgasta nuestro amor.

Amor duradero en la distancia.

Distancia que es corta comparada con mi sonrisa al verte.

Y corto los pasos que hay desde tu pantalón a tu cama.

Cama envuelta en incendios.

Incendios inocentes.

Como inocente me vuelvo cuando me haces sentir única.

Única quiero ser en tu vida.

Porque a tu lado me siento viva. 

I.

Conexiones personales

Siempre estamos obsesionados con buscar a la media naranja, ese amor platónico que no nos deja dormir y que nos hace cometer mil y una tonterías, porque cruzarías el océano por esa persona. Cuando creces y vas haciéndote mayor, vas teniendo relaciones que no suelen acabar en "... y vivieron felices y comieron perdices" sino en un sálvese quién pueda, te das cuenta que el verdadero amor no es el que se fragua desde la ceguera, lo idílico y utópico.

Por eso, cuando has perdido toda esperanza de que encontrarás a alguien con quién compartir tu vida e incluso cuando empiezas a dudar de si realmente el amor existe. Justo ahí, aparece una persona que te da la vuelta a lo que creías que eran respuestas,te revuelve todo dándote unas aseveraciones diferentes a las concepciones que tenías en mente. 
Así que, al final (o al principio), te encuentras compartiendo tu vida con una persona increíble que te cambia los esquemas pero no dejas de ser tú mismo y todo fluye por ello, no cambia tu vida y es que las cosas suceden a veces por inercia -porque ni lo has pensado- aunque estás seguro de que estarías con ella siempre. Sólo sabes que la quieres y que no te importaría tenerla a 600 kilómetros sólo con escucharla cada día feliz a través de un teléfono.

Jamás imaginé que tendría una conexión así con una persona. Y sí, haría cualquier cosa por ella.

I.

Myself.

Ya lo decía mi padre diariamente, pero es que la desconexión se hace cada vez más evidente y me noto a cien años luz de cada una de las personas con las que antes compartía cada milímetro de mi vida, pensamientos y emociones.

Y es que tengo que ser yo, que lo mismo de siempre me aburre o qué se yo. El caso es que sentirse un punto entre esta inmensa humanidad asusta, o no, pero es muy desconcertante. Sobretodo cuando ves que conectas en pensamientos sólo con una o dos personas, contadas.

Las aficiones juegan un factor importante, que no sólo es divertido irse de festival, cervezas o discoteca con alguien si luego a los dos días, si te he visto no me acuerdo o más bien, si te encuentras mal, te dejo aquí colgando de un hilo como los funambulistas.

En fin, será un proceso de autoaprendizaje con el mundo, en el que la única conclusión que saco, es que nadie pertenece a nadie y al final sólo quedarás tú contigo mismo.

I.

Y de repente...

Cuando todo crees que va en el sentido equivocado, y andas a contracorriente... de repente, algo empieza a funcionar y cuando te has dado cuenta, tu vida empieza a fluir lentamente.

Buenas vibraciones, emocionantes sensaciones, conmigo misma y con el resto del planeta. Sentir una perfecta armonía con el mundo, además de sentirla con la persona que quieres compartir todas esas buenas experiencias, sabiendo que tu amor hacia ella, va en el sentido correcto.

I.

Oscura curiosidad.

Sólo la movía un impulso. La curiosidad.
Pero es muy peligroso intentar indagar en una mente tan rococó, y aquel día lo supo.
En el fondo tenía la esperanza de que sería algo agradable, bonito y tal vez que la ilusionase, aunque sabía que iba a encontrar rincones desagradables no imaginó que se encontraría el vacío más grande y oscuro que jamás vio, inundándose sus ojos del más líquido y doloroso cristal. Incluso notó cómo le llegaba al corazón una de las esquirlas.
Sentía que lo quería como nadie quiso a ningún otro ser, que le entregó su amor sin reservas, a pesar de los miedos y que no quería dejar de quererle nunca... pero, parece que a veces el amor se acaba... o no el amor, pero si la ilusión y las ganas. Era simple, los sentimientos cambiaban.
Aún así cuando llegó, no le dijo nada porque sabía que aquel impulso que la movió, no estaba bien y ahora en su cabeza se repetía una y otra vez "No deberías haberlo hecho". Pero ella era así, ya en otra ocasión prometió no volver a hacerlo y aún así, estaba en la misma situación... o peor.

Y si no hubiera indagado en su mente, las cosas hubieran seguido bien.
Y ella en el fondo, deseaba que fueran bien.

I.

Problemas, errores y todo lo que sigue.

Hay veces que las cosas salen mal por las circunstancias del momento y no es culpa de nadie, pero siempre tengo la manía de querer martirizarme a mi misma de ser la única culpable. 
Como si tuviera que encerrarlo en una cajita y ponerle un lacito para poder decir: "venga, ha sido todo culpa tuya, ya puedes deprimirte tranquilamente" y entonces es cuando entierro el terrible sentimiento que me apesadumbra.
Y una persona en su sano juicio diría, bueno no pasa nada, sólo has cometido un error, tranquila.
Pues yo, no. No soy feliz no poniendo la música más triste que tengo en el iPod y pensando una y otra vez la desdicha que llevo puesta como mejor vestido ese día.

Además no sólo me deprimiré por el problema en cuestión, sino que mi querido cerebro intentará demostrarme que soy mucho peor de lo que me imaginaba y conseguirá que acabe regodeándome en mi tristeza -cada vez más en aumento-, recordándome errores pasados, presentes e incluso futuros, porque total, ¡seguro que llegarán!.

Ahora bien, como el error haya sido realmente mío... ¡Cuidado si os encontráis conmigo en el camino! 
Puede que vaya arrastrándome por el suelo, con el iPod a cuestas y las canciones más depresivas que podréis oír jamás en la lista de reproducción.
Pero es que no puedo evitarlo, los problemas me hacen sentir mal, muy mal, al igual que las alegrías me hacen estar en el momento más álgido de mi felicidad. Ser una montaña rusa emocional es realmente complicado, aunque supongo que lo difícil es que alguien pueda lidiar conmigo... pero bueno, aquí ando repitiendo una y otra vez lo terrible que es cometer errores y escuchando música terroríficamente deprimiente para intentar sentirme mucho mejor -aunque sea totalmente contradictorio-.

Y lo consigo.

I.

Conversaciones que llevan a reflexionar.

¿No os pasa a veces que no te apetece contestar, justo lo primero que te preguntan en cuanto te ven?
Parece que saben que no quieres hablar de ello y quieren meterte el dedo en la llaga... Y en cuánto te ven.
Pum. 
A traición, donde más te duele.

Quizás pasar la vida con gente que forma parte de tu pasado o de lo que te gustaría que fuera tu presente, hablando todo el tiempo de donde están - que es justo donde te gustaría estar a tí- que hacen y porque lo hacen solo hace sentirte mal.
Puedo llegar a pensar, "oye, no seas envidiosa, sólo te hacen partícipes de su felicidad", pero pensándolo mucho, llego a la conclusión de que no es eso. Lo único que siento es tristeza y unas ganas de huir tremendas por no poder estar donde me gustaría, haciéndote eco de sus vivencias -donde hace apenas unos meses te encontrabas tú-.

Es duro ver como las cosas cambian - o más bien cambian para ti- ya que los demás siguen con la misma vida, los mismos proyectos... Y tú sigues ahí,en el mismo punto, pero en uno distinto, intentando evolucionar aunque te sientes más perdida que nunca, con ganas de empezar de nuevo, intentando ser positiva, ver lo bueno de las cosas - aunque se hace muy difícil- porque sino sabes que te hundes.
Y ni siquiera puedes permitirte eso.

I.

Happy Valentine's Day

Mi pequeña aportación al día del amor.

PD. El vídeo tiene una errata, pero me costó mucho grabarlo y me dí cuenta tarde... :(

I.

Amor

Ella estaba enamorada de él, no podía quitarle los ojos de encima. Allá dónde iba ella, allí estaba.
Pero él siempre vivía ajeno y a paso rápido, sin fijarse.
Todos los sabían, menos él.
Un día se paró y miró alrededor... Lo demás es historia.

I.

Huída.

O es que el mundo se ha vuelto loco de repente, o yo estoy súper cuerda, pero no entiendo que pasa.
¿Tan diferente soy de los demás? ¿Tan rara es mi forma de pensar?, porque lo que a mi me parece evidente, se escapa a los ojos de los demás. 
Lo mismo es que mi forma de pensar es totalmente inacertada, inadecuada o loca... el caso es que al final, siempre estoy llena de problemas.
Parece que haga lo que haga siempre acabo cometiendo los mismos érrores, eso es, distinta gente, distinta situación, mismos conflictos, mismos malentendidos. Y seguramente la culpa al final será mía, como siempre, siempre soy yo el problema de todos los sitios, ¿tan complicada soy de tratar?.

En definitiva, aunque tú creas que estás bien, los viejos fantasmas del pasado de una forma u otra siempre te atrapan y ahora mismo tengo una sensación y unas ganas de huir de la ciudad, que si fuera rica ya estaría montada en un avión, con las maletas hechas y con ganas de olvidarme de todo el mundo que me rodea y empezar de nuevo...
Quizás eso sea lo más cobarde, huír, escaparse, olvidarse de los problemas y no enfrentarlos, pero es que ya estoy tan cansada... y todos se magnifica cada vez más...


Me temo que hoy ni siquiera Yann Tiersen va a poder calmarme...

I.

Kilómetros

Todas las relaciones son difíciles, sobretodo si quieres que sea duradero y sólido.Pero más difícil es aún, cuando la persona a la que quieres se encuentra a 700 kilómetros de tu vida.

Al principio era fácil, o quizás era la esperanza de que lo fuera, el querer intentar romper con todos los prejuicios de que una relación a distancia implica olvido o desamor... pero de un modo u otro se hacía mucho menos cuesta arriba. También he de decir, que todo estaba empezando, no digo con ésto que no tuviéramos ganas de estar juntos, por supuesto, pero cuando empiezas algo todo va a un ritmo más lento a pesar de las ganas, por la coraza que tenemos todos para que no nos hagan daño, siempre vamos de puntillitas hasta cuando nos damos cuenta, hemos entrado en el corazón de la otra persona y es cuando realmente comienzas a confiar.Ahora... bueno, ahora es diferente, también las cosas han cambiado porque han madurado, se han solidificado y las ganas de estar juntos, de compartir una vida en común se han multiplicado por mil.
Aunque también es cierto que la relación está formada bajo la sinceridad, la comunicación, el amor, el deseo... eso que poca gente que tiene una relación puede asegurar al cien por cien, ya que ahora las relaciones son prácticamente de usar y tirar, las cosas no se arreglan cuando se rompen, simplemente se tiran y es normal -aunque no debería serlo-, ya que vivimos en una sociedad consumista, capitalista y donde los valores como el amor quedan en segundo plano respecto a otros que no tienen tanta importancia, ni transmiten todo lo bueno que deberían, siendo mucho más primordiales, para "sobrevivir" en este mundo.

Supongo que lo más difícil, es pensar las ganas que tienes al llegar a casa después de un día duro, de estar con esa persona a la que quieres, de abrazarla, estar con ella, ver una peli juntos en el sofá, cualquier tontería a ojos de otra gente que lo tiene accesible, es lo que echo de menos.Los detalles. Esos detalles que al final, caigo en la cuenta que algún día tendré diariamente, que sólo es temporal y que ésto sólo puede hacernos fuerte o destruirnos y creo que vamos en camino para conseguir lo primero y que transformemos el número de kilómetros en un número proporcional de besos, abrazos y te quieros.

I.

Decisiones

Qué difícil es acertar.
Hay veces que hagas lo que hagas, nunca está bien para algunas personas. Y que inseguridad genera todo eso, porque son personas a las que quieres y te importa su opinión... pero en ocasiones me dedico más a pensar en mi que en todo el mundo que me rodea.
Me encierro en mi cuarto, me pongo música que me hace sentir bien y me hago preguntas como, ¿pero qué quieres tú?, ¿qué te gustaría hacer en esta situación? y es cuando todo empieza a tomar forma. Claro, ¡eso ocurre cuando tengo claro lo que quiero!, cuando no lo tengo claro me cuesta más saber que es lo que creo que es mejor para mi, pero siempre que tomo una decisión, suelo ser firme y consecuente con ella.

¿Os imagináis una vida donde nadie se equivocase?
Todo saliese como esperas siempre, que tu esfuerzo por realizar tus sueños sirviesen, que tomases la decisión que tomases no hubiera ni siquiera ese "miedo a equivocarse"... Sería todo mucho más fácil, pero quizás no tan divertido, ¿no?

I.

20 años sin Audrey

“Pienso en rosa. Creo que reírse es la mejor manera de quemar calorías. Creo en los besos, en besar mucho. Creo en ser fuerte cuando todo parece ir mal. Y creo que las chicas felices son las más bellas. Creo que mañana es otro día y creo en los milagros".  

Audrey Hepburn

Soneto 116

Déjame que el enlace de dos almas fieles,
No admita impedimentos: no es amor el amor
Que cambia cuando un cambio encuentra,
O que se adapta con el distanciamiento a distanciarse.

¡Oh, no!, es un faro eternamente fijo

que desafía a las tempestades sin nunca estremecerse; 

es la estrella para todo barco sin rumbo, 

cuya valía se desconoce, aun tomando su altura.
No es amor bufón del Tiempo, aunque los rosados labios
Y mejillas corva guadaña sigan:
El amor no varía con sus breves horas y semanas,
Sino que se afianza incluso hasta en el borde del abismo.

Si esto es erróneo y se me puede probar,
Yo nunca nada escribí, ni nadie nunca amó.

William Shakespeare

Donde creí no volver jamás.

Creía que sólo era una etapa y no iba a adentrarme otra vez allí, pero no, ahí es donde vuelvo. Parece que hay veces que no puedes evitar ser la peor versión de ti mismo y aunque no quieras, esa parte de ti siempre estará ahí, porque tú eres el mismo, aunque creas que has cambiado... con los mismos miedos, las mismas inseguridades, las mismas lágrimas que se caen solas, las injusticias, los millones de problemas, todo, todo, todo sigue ahí a pesar de que tu sentías que tu vida era "diferente" y que el cambio era mucho mejor.

Pero cómo cambiar si sigues en la misma ciudad que te consume, rodeada de la misma gente, las mismas actitudes, tu casa -que cada vez la sientes menos como un hogar- los mismos sitios...
Puede que sólo sea un mal día llevado al extremo como todo lo que me caracteriza, de hecho, espero que sea un mal día complementado con la exageración que me define.

Pero aún así, hoy he vuelto a hace dos años... justo cuando sentía que tenía que hacer algo con mi vida y con esta maldita montaña rusa que tengo en mi interior acerca de mi futuro, mis ganas de ver la vida y de lo que quiero hacer con ella.
Que al final todo se resume a la pregunta que siempre llego en este punto, ¿Cuántas veces tienes que hacer lo que debes y no lo que quieres?

I.

Ciclo de emociones.

12. Julio. 2012

Despedidas.
¿Por qué hay que decir adiós cuando lo único que quieres es estar a cada minuto con las personas que te importan?

Seguir compartiendo experiencias, sensaciones y sentimientos juntos y ver que el reloj de arena se vacía, que se acaba todo con más gloria que con pena, porque la única pena es que todo llega al final.
Hay personas que pasan por tu vida, porque simplemente tuvieron que estar ahí en ese momento, te marcan la existencia y se van sin más. Pero eso es lo que las hace más importantes y especiales, dejan una mayor huella que si hubieran estado a tu lado toda la vida…

PD: Aunque esta vez voy yo a buscarte, antes que dejarte.
Por que lo nuestro no es una despedida, es un hasta luego. <3

I.

Empty

Cuando agarras algo con fuerza, pero ves que se te va, que tiene que irse y que es imposible que se quede aunque te aferres.
Acabando con una "sensación de vacío existencial".
Pero las distintas razones y circunstancias no siempre juegan a nuestro favor, ni a lo que preferimos o deseamos con todas nuestras fuerzas...
Que sólo con saber que te has marchado después de haber estado en un sueño, nuestro sueño... Que sin ti se convierte en una maldita pesadilla...
¿Por qué es siempre todo tan difícil?
Si yo te necesito más que a nadie, te necesito...
Vuelve.

I.

Aquel catorce de Julio. Parte 1

Aquel día nada era normal, desde los nervios de saber a quién tenía a mi lado como el ser consciente- o no- de lo que estaba haciendo, asumiendo todas las consecuencias de lo que creía ver fracasar.

Pero no fue así, resultó ser justamente la antítesis de lo que solía pasar siempre... Aquel día a pesar de ser raro e inusual, estaba siendo real.
Aprovechaba la conducción para evitar mirarte, si lo hacía me daba cuenta que estabas ahí, que habías acudido a la cita, que ya no teníamos una relación profesional como justo teníamos dos días antes. Te escuchaba hablar sin parar, aunque me costaba seguir tu ritmo, tenía la mente en cuando bajáramos del coche y en la locura que me parecía que estaba cometiendo, pero aún así era inevitable decir que no.
Los mil discos que escuchamos, marcarían la banda sonora de los siguientes meses, pero aún no lo sabíamos y la escuchábamos ajenos a lo que se nos venía encima.

Aquel día hacía calor, y no solo por el increíble sol que se reflejaba en el mar de forma altiva, sino por el roce de tu piel que hacía que la mía se erizara de forma que cada poro ardía. Los plomos de la electricidad de mi cuerpo saltaban lentamente, notaba como chispitas recorrían mi piel... y cada vez estábamos más cerca.

Lo demás mejor dejarlo para el recuerdo, o quizá os lo cuento otro día.

I.

Recordando inspiraciones de un catorce caluroso.

Agosto. 14.

El té por la noche sienta mejor contigo. Los te quiero que han oído las cuatro paredes de tu habitación. El olor de las velas apagadas es mejor a tu lado. Tu piel. Las palabras bonitas que han salido por tu boca cuando hablas de mí. Los nervios del principio. Las ganas de conocernos, de aprendernos, que nunca faltan. Los viajes que nos quedan por hacer. El agua salada del mar con tus labios. El agua de la ducha congelada. Mis manías. Las caritas de enfado. Las ganas de volver a casa para verte. Las horas en el coche. Los días largos sin tus labios. El olor a ti en mi pelo cuando no estoy contigo. Tus sonrojos cuando te miro. La música que me lleva hasta ti. Tus gestos espontáneos. Los días enteros en la cama. Los abrazos. Lo pequeña que parezco a tu lado. Lo grande de nuestro amor. Amor natural. Amor fácil. Que nadie entendería. Y que nosotros cada vez entendemos menos. Pero nos encanta.

I.

Bienvenidos.

La inspiración según la Real Academia Española es "Infundir o hacer nacer en el ánimo o la mente afectos, ideas, designios, etc. "

Mientras que algo emocional es "Alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa, que va acompañada de cierta conmoción somática."

Imaginad que es lo que pasa, cuando juntamos las dos palabras, creando una sinergia al formar una sola.
En este blog contaré todo lo que me inspiré o me emocione, o quizá la suma de ambas...
Bienvenidos.

I.